La prosperidad es posible para todos.
Hay un universo infinito de oportunidades, sólo toma la que te lleve a ella. ¿Cómo hacerlo?
Es muy sencillo: primero visualízate siendo próspero, segundo define qué es para ti prosperidad y tercero ve por ella.
Los atributos de la prosperidad son varios:
- Logros: la confianza de alcanzar algo.
- Satisfacción: el agrado de cumplir una meta.
- Acción: la seguridad te pone en movimiento.
- Esperanza: dar el siguiente paso con fe.
La prosperidad es como un diamante que debe ser sacado de entre la tierra. Explora el camino y encuéntralo.
Y recuerda, si deseas saber más, te sugiero leer mis libros, donde encontrarás más reflexiones para elevar tu aprendizaje espiritual.